Pedro Ortega, concejal de Medio Ambiente: “El camino Istán-La Concha es uno de los senderos donde más gente se pierde en toda la provincia”
El Ayuntamiento de Istán ha acondicionado un sendero que facilita ostensiblemente los rescates en el entorno del barranco de Monchalbán, un punto crítico en el que muchos caminantes se equivocan de camino y entran en una zona de la que no pueden salir.
Es un fenómeno muy frecuente a lo largo de todo el año, pero especialmente en fechas veraniegas, porque los encantos de Sierra Blanca y Sierra de las Nieves atraen a un buen número de turistas que desconocen el entorno y se adentran en zonas peligrosas, lo que, a menudo, obliga a desplegar a un completo equipo humano y material para su rescate, incluso, habitualmente, un helicóptero, con la movilización de Guardia Civil, Bomberos y voluntarios de Protección Civil.
Según explica el concejal de Medio Ambiente, Pedro Ortega, “el Camino de Istán-La Concha es uno de los senderos donde más gente se pierde de la provincia. Lo que ocurre es que, cuando el senderista sale del Juanar, en Ojén, a la vuelta, se confunde y se desvía para el sendero que va hacia Istán y en el momento en que
AYUNTAMIENTO DE ISTÁN
Plaza de Andalucía, s/n 29611 Istán
llega a La Cañada de Monchalbán y ve algunas viviendas de las urbanizaciones, decide acortar camino y termina perdiéndose”.
El primer paso fue llenar la zona con cadenas y carteles, en los que se puede leer: “Atención, caída al vacío”. Advierten sobre estos peligros e, incluso, informan de que, si vas a Juanar, hay que dar la vuelta. Pero los incidentes siguen produciéndose y el Consistorio ha desbrozado y despejado un antiguo sendero que va a servir de evacuación y que parte de la senda entre Istán y Marbella.
El camino, en cualquier caso, está señalado como vía de evacuación y esa es su única función. No está abierto para el disfrute de los senderistas.
Aunque hay más de una decena de senderos oficiales que discurren por el término municipal de Istán y, en su mayor parte, pueden ser recorridos sin apenas dificultad, los que atraviesan Sierra Blanca, hacia Ojén y, particularmente el protagonista de esta información, el de La Concha, son complejos. “Tiene una altura considerable y puede resultar más complicado de lo que está acostumbrado un senderista normal”, apunta Ortega.
El concejal que, como sus compañeros en el Ayuntamiento, está más que familiarizado con este tipo de incidentes, quiere dejar bien claro que en estas caminatas, en verano, “a partir de las 12 de la mañana hay que estar de vuelta a casa. Hay que madrugar para hacer un sendero como ese y, por supuesto, llevar agua, comida y buen calzado, en todos, pero especialmente en este”.
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